Desde la infancia hasta la adolescencia, Jahmon fue un chico extrovertido y simpático. Iba bien en la escuela, estudiaba ingeniería en la Universidad de Colorado en Boulder (CU Boulder) y tenía por delante un futuro brillante. Pero en 2004, su mundo dio un giro de 180 grados.
Empezar por el principio
Jahmon y su hermano fueron criados por su madre, una contable trabajadora y ferviente defensora de sus hijos. Aunque su papá no estaba muy presente durante su adolescencia, la infancia de Jahmon fue estable y cómoda.
“Yo era un niño feliz, y tenía muchos amigos – no tuve el tipo de infancia traumática que uno podría esperar que desembocara en un diagnóstico de salud mental”, dijo Jahmon. “Nunca piensas que algo así te va a afectar, sobre todo cuando eres niño o adolescente”.
Jahmon se graduó en el instituto con el promedio de calificaciones más alto entre sus amigos y comenzó a estudiar ingeniería en la Universidad de CU Boulder. Allí estuvo dos semestres antes de que su mundo cambiara para siempre.
“Tengo una discapacidad psicológica”
En 2004, Jahmon se metió en problemas y pasó un tiempo en la cárcel. Estaba sufriendo lo que más tarde se reconocería como un episodio maníaco, pero no tenía ni idea de lo que le estaba ocurriendo en ese momento. Durante este episodio, Jahmon amenazó con suicidarse, lo cual hizo que un juez recomendase que se sometiera a pruebas para detectar enfermedades mentales, o como Jahmon se refiere a ellas, una discapacidad psicológica.
Al intentar obtener un diagnóstico, Jahmon se puso en contacto con WellPower y se le diagnostico trastorno bipolar, una enfermedad mental que afecta al estado de ánimo en grados extremos a través de episodios maníacos y depresivos.
“Una vez que me reconecté con WellPower, empecé a hacer sesiones de terapia”, dijo. “Cuando empecé esas sesiones, no hablaba nada. No me gustaba conversar con la gente. Sólo tenía 22 años”.
“El equipo clínico con el que trabajé en WellPower también me hizo probar distintos medicamentos para ver qué me podía ir bien¨, explica Jahmon. “Pero muchos de esos medicamentos tenían efectos secundarios bastante malos. Algunos me hacían aumentar de peso, otros no eran buenos para el corazón. En aquella época fue un proceso de prueba y error muy doloroso para mí.”
Destellos de esperanza
Mientras Jahmon intentaba encontrar el equilibrio para afrontar su nuevo diagnóstico, también estaba tratando de entender cómo sería su futuro.
Su madre, que siempre fue su firme e inquebrantable defensora, le sugirió que reiniciara los estudios y considerara la posibilidad de estudiar empresariales.
Jahmon siguió su consejo y se matriculó en el Community College de Aurora.
” En muchos aspectos sentí que tenía que empezar de cero”, dijo. “Sinceramente, fue muy duro para mí. Intentaba redescubrir quién era después de todo el trauma provocado por mi discapacidad psicológica y, al mismo tiempo, construirme un nuevo futuro. No te dicen lo difícil que es resolver tu vida mientras estás tratando de salir de un agujero que ni siquiera has creado”.
La determinación de Jahmon dio sus frutos. Al cabo de cuatro años, consiguió licenciarse en administración de Empresas.
Sin embargo, sabemos que cuando se trata de la salud mental, el camino hacia la recuperación no suele ser algo lineal. Se requiere tiempo, paciencia y trabajo, y a menudo surgen contratiempos o retos inesperados.
Superar los obstáculos
En 2009 Jahmon comenzó a trabajar con el Dr. Carl Clark, que había continuado ejerciendo como proveedor durante su etapa como presidente y director de WellPower, y ha continuado sus sesiones con el Dr. Clark durante los últimos 15 años.
“Trabajar con el Dr. Clark ha sido una de las mejores cosas para mí”, dice Jahmon. “Aunque no ha sido fácil. El Dr. Clark hace muy buenas preguntas y explica los temas para ayudarme a entender lo que estoy sintiendo. Se nota que le apasiona ayudar a la gente, ayudarme a mí”.
Al trabajar con excelentes proveedores clínicos como el Dr. Clark, significa que a veces saldrá a la luz nueva información sobre el diagnóstico de una persona. En 2010, Jahmon volvió a ser diagnosticado con Trastorno esquizoafectivo, el cual afecta al estado de ánimo y a los pensamientos.
” Ha sido un periodo realmente difícil para mí”, afirma. “Había momentos en los que ni siquiera podía articular palabras. Recuerdo que mi madre me llevó a un hospital universitario y el médico que me atendió dijo que, desgraciadamente, era parte del trastorno. Recuerdo que me sentía tan desesperado y que no me gustaba nada esa palabra: ‘desgraciadamente’. Sigue sin gustarme. Es como un golpe en el alma. La gente la dice cuando no puede o no quiere ayudarte”.
Sin embargo, Jahmon no perdió toda esperanza. Además de sus servicios clínicos regulares, también pudo acceder a rehabilitación psiquiátrica a través del programa NextChapter (antes 2Succeed) de WellPower.
“NextChapter fue absolutamente increíble”, dijo Jahmon. «Me ayudaron a acudir a mis citas, me ayudaron a veces con la medicación y me ayudaron a conseguir un trabajo en WellPower. Eso realmente impulso mi trayectoria hacia la recuperación. Siempre estaré muy agradecido a la gente de NextChapter: son increíbles, compasivos y se nota lo mucho que se preocupan.”
Encontrando su camino
Los proximos 10 años de su trayectoria fueron marcados por un progreso lento, constante y positivo. Trabajó en el equipo de limpieza del programa de formación profesional de WellPower durante cinco años. Se presentó a una entrevista y consiguió el puesto de director residencial en uno de los edificios de apartamento de WellPower. También conoció a su mujer.
“Durante todo este tiempo, he tenido que descubrir quién era como persona al mismo tiempo que manejaba mi discapacidad psicológica”, dijo. “Fue duro pasar por ello, y fue muy duro para mi madre el ver a su hijo pasar por tantas incógnitas durante tantos años. Tanto mi madre como mi mujer han sido las rocas que me han mantenido firme”.
“Ahora miro hacia atrás y veo con claridad cuánto apoyo he recibido de WellPower y de la gente que me quiere”, dice Jahmon. “WellPower me animó a exponerme más, a volver a ser la persona feliz que era de niño. Nadie esperaba que olvidara por lo que he pasado, sino que creciera a raíz de una parte de mí que siempre había existido.”
Jahmon empezó a tomar medidas para recuperar amistades, encontrar aficiones sanas y rodearse de personas que le sirvieran de mentores y le apoyaran. Gracias a su gran esfuerzo, perseverancia y fidelidad a sus valores, está orgulloso de la persona en la que se ha convertido.
Encuéntrese a sí mismo y sea fiel a esa persona
A sus 41 años, Jahmon está felizmente casado y es padre de dos hijos, propietario de su casa, tiene una gran carrera, está rodeado de seres queridos y sabe muy bien quién es, con discapacidad psicológica incluida.
“Una vez que conoces a la gente de WellPower, ves que quieren que tengas éxito en la vida”, dice. ” Resulta más fácil confiar en ellos, hablar de lo que te pasa. Ser vulnerable y estar dispuesto a que alguien te ayude no es nada malo ni es una debilidad. Hay gente que se preocupa de verdad por tu bienestar y que quiere ayudarte a que te ayudes a ti mismo.”
“Soy la prueba viviente de que la gente puede superar todas las adversidades y obstáculos de su vida”, afirma Jahmon. “Solo tienes que ir paso a paso, apoyarte en tus puntos fuertes y reconocer que tus debilidades también pueden convertirse en virtudes”.