El año escolar se acerca rápidamente, y los niños de todas las edades suelen tener una mezcla de sentimientos sobre el final del verano. Carly Keeshen, directora de educación especial de WellPower, y Dennis Vega, asesor vocacional, dan consejos a padres, niños, jóvenes y adultos jóvenes sobre la gestión de la salud mental y el bienestar al empezar la escuela.
Aliviando preocupaciones
Para los alumnos de enseñanza primaria y los de enseñanza secundaria, algunos de los mayores retos suelen ser el miedo al cambio y la falta de confianza ante el próximo curso escolar. Puede que los niños estén preocupados por lo que pueden esperar de sus profesores, no estén seguros de dónde está su aula, estén nerviosos por los nuevos horarios o simplemente no sepan cómo desenvolverse cuando pasan de un curso a otro.
“Lo mejor que pueden hacer los padres es trabajar juntos como una unidad familiar y preparar, preparar y preparar para el año entrante”, dice Keeshen. Cuando vea que las estanterías de las tiendas se están llenando de material para la vuelta a la escuela, eso será un buen indicador de que ha llegado el momento de hablar con sus hijos sobre lo que les espera en el nuevo curso escolar”.
“Recomiendo empezar por hablar de los horarios y ayudar a los niños a entender sobre qué tienen elección y control cuando empiece el curso escolar”. Permítales elegir ropa adecuada para el clima, tener una opinión sobre su almuerzo del día o llevar un cuaderno o carpeta personal a la escuela. Eso puede hacer que los niños sientan que tienen un cierto control sobre sus días aun cuando todo lo demás se elige por ellos”.
Los estudiantes universitarios y de preparatoria y podrían tener preocupaciones similares sobre los cambios que traerá un nuevo año, así como nervios sobre la carga de trabajo y la gestión del tiempo.
“Los adolescentes y los adultos jóvenes deben tratar de determinar quiénes son sus personas de apoyo dentro de la escuela”, aconseja Vega. ” Es estupendo contar con adultos como asesores de orientación, los psicólogos escolares, los administradores, los profesores y los entrenadores ya que pueden responder a las preguntas y también pueden informar a los adolescentes y adultos jóvenes sobre los recursos importantes disponibles.”
Involucrar a toda la familia
El primer paso para calmar la ansiedad ante la llegada del nuevo año es involucrar a toda la familia en los preparativos y la planificación. Padres, cuidadores y estudiantes de todas las edades pueden trabajar juntos de manera apropiada para su edad con el fin de crear sentimientos de responsabilidad y de rendición de cuentas sobre el próximo año. Consulte los siguientes consejos para cada franja de edad.
Enseñanza primaria (kinder hasta 5º grado ): Ayude a los alumnos de enseñanza primaria con la transición de vuelta a la escuela al iniciar el trabajo de preparación con antelación. Hable con su estudiante sobre lo que puede esperar del próximo año, cómo será su horario y empezar a practicar para la nueva rutina. Unas semanas antes de que termine el verano, hacer algunos ensayos de la rutina mañanera que se seguirá durante la jornada escolar— practicar el levantarse a su hora, vestirse para el día, preparar los almuerzos (aunque ¿sabía usted que los niños tienen almuerzo gratis este año?) y hacer el recorrido hasta la escuela. Si es posible, visiten la escuela y conozcan juntos al profesor de su estudiante. Además, darle a su estudiante un control apropiado para su edad sobre las decisiones de su día (como la ropa, el almuerzo o las actividades extraescolares) puede facilitar la transición de la libertad del verano a la rutina más rígida de la escuela.
Enseñanza secundaria (6º a 8º grado): Al igual que los consejos para la enseñanza primaria, prepare a su estudiante unas semanas antes de que empiecen las clases y practiquen su rutina. A esta edad, también es una buena idea conversar con el estudiante sobre las dinámicas sociales y las amistades a medida que navegan en sus años de preadolescencia y adolescencia temprana. El hecho de ofrecerle a su estudiante un espacio en el que pueda mostrarse vulnerable ante sus sentimientos y fomentar una comunicación abierta puede ayudar a su estudiante de enseñanza secundaria a afrontar los difíciles cambios evolutivos y el aumento de la carga de trabajo y también de las expectativas.
Preparatoria (9º a 12º grado) Brindar apoyo a los estudiantes de preparatoria puede consistir en enseñarles a gestionar el tiempo de forma eficaz, dejar espacio para una vida social en constante cambio y entender que el aumento de la carga de trabajo puede aumentar el estrés y la ansiedad. Ayudar a su estudiante de preparatoria a identificar a las personas y recursos de apoyo más importantes puede aliviar un poco la presión. Además, recuérdele a su estudiante de preparatoria que, si bien las actividades extracurriculares pueden ser una excelente manera de fortalecer amistades y desarrollar habilidades, deben tener cuidado con el agotamiento causado por excederse demasiado.
Educación universitaria y estudios superiores: Los padres y cuidadores que deseen apoyar a sus estudiantes en edad universitaria pueden hacerlo de la mejor manera posible, haciéndoles saber que siempre estarán ahí para lo que necesiten y ofreciéndoles ayuda o consejo cuando lo soliciten. A esta edad, los estudiantes están encontrando con un nuevo nivel de independencia. Los padres y cuidadores pueden servir de lugar seguro al que recurrir cuando el estudiante necesite esa tranquilidad emocional. Desde un punto de vista práctico, ofrecer ayuda con el papeleo y las tareas administrativas puede aliviar el estrés de los estudiantes.
Si usted o su estudiante están batallando con la transición de regreso a la escuela, o simplemente buscan apoyo en otras áreas de la vida, WellPower está aquí para ayudar. Póngase en contacto con nuestro centro de acceso llamando al (303) 504-7900 o visítenos en línea en wellpower.org/access para más información.